Se olvida de Oaxaca: María Elena Ríos va por diputación federal con otro estado
Carmen Martínez.
La saxofonista María Elena Ríos ha dejado a un lado su lucha de justicia por su ataque con ácido sufrido en el año 2019, y ahora ha logrado colarse en el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) para buscar la diputación federal por la vía plurinominal.
Sin embargo, el gusto le sabrá poco, ya que la oriunda de Huajuapan de León solo logró ser suplente de Manuel Vázquez Arellano, candidato indígena de Morena para Diputado Federal en la circunscripción 4, que corresponde a la Ciudad de México, Guerrero, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala.
Es decir, que María Elena Ríos ni siquiera representaría a Oaxaca en el Congreso de la Unión si el titular de la candidatura gana el curul y le sede su espacio a la saxofonista; por lo que muestra que su ambición política va más allá del cariño que presume tener por el estado.
Desde que se hizo pública la intención de Ríos Ortiz de irse al Congreso, activistas de Morena y grupos sociales, principalmente de la Mixteca, consideraron que lo suyo era oportunismo para brincar a la actividad política sin tener un vinculo social, pero sí una ambición económica desmedida.
Por este motivo, la saxofonista buscó otra vía para conseguir su objetivo político, sabiendo que no tendría el apoyo de sus paisanos, y tan ocupada está en su carrera dentro de Morena, con la ayuda de sus abogados ha logrado retrasar el juicio contra su presunto agresor.
Manuel V. C., quien fue detenido como presunto autor intelectual del ataque con ácido que sufrió María Elena en el año 2019, debió tener su audiencia de sentencia el pasado 15 de enero; pero, por estrategia política, la difirieron hasta el seis de junio, pasando las elecciones en donde la saxofonista confía ser diputada suplente electa y así poder cubrirse ante probables consecuencias jurídicas que pudieran generarse por su caso.