Sanción histórica a entrenadores por maltrato a la gimnasta Elsa García
Una denuncia de la gimnasta mexicana Elsa García derivó en la suspensión de los entrenadores franceses Eric Demay y Cécile Pellerin Demay, durante dos y un año, respectivamente, quienes la maltrataron física y sicológicamente cuando en 2019 fueron contratados por el presidente de la Federación Mexicana de Gimnasia, Gustavo Salazar, para entrenar a la selección nacional a pesar de sus antecedentes de violencia contra deportistas de otros países.
La histórica sanción fue emitida el 11 de abril último por la Comisión Disciplinaria de la Fundación de la Ética de la Gimnasia (GEF por sus siglas en inglés), un organismo que nació en enero de 2019 con la finalidad de proteger del acoso y el abuso a las atletas y otros participantes en la gimnasia, así como llevar a cabo procedimientos disciplinarios en contra de quienes rompan las reglamentaciones de la Federación Internacional de Gimnasia (FIG).
Además de que durante el tiempo mencionado los Demay tienen prohibido ejercer como entrenadores, tampoco podrán recibir una acreditación ni desempeñar cualquier rol en una competencia internacional o evento avalado por la FIG. Como requisito para regresar a sus actividades de entrenamiento se les ordenó someterse a una capacitación acreditada en materia de salvaguardia y protección.
Asimismo, la GEF multó con 10 mil francos suizos a la Federación Mexicana de Gimnasia (FMG) y le ordenó crear, antes del 31 de diciembre de este año, un protocolo de acción preventiva y correctiva que deberá incluir una evaluación en retrospectiva de lo que hizo mal o dejó de hacer para salvaguardar la integridad de Elsa García.
Este caso comenzó el 21 de noviembre de 2019 cuando la gimnasta regiomontana Elsa García presentó una denuncia a través del portal de internet de la GEF para señalar la mala conducta del matrimonio entre Eric Demay y Cécile Pellerin Demay, quienes fueron contratados en marzo de 2019 con la intención de mejorar el desempeño y prestigio de la selección nacional de gimnasia rumbo a los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020.
De acuerdo con el testimonio que ofreció la deportista, los malos tratos comenzaron en abril de 2019 y fueron escanlando hasta el Campeonato Mundial que se realizó en octubre en Stuttgart, Alemania. En los hechos que relató —y que acompañó con pruebas documentales como videos— García destacó que altos funcionarios de la FMG, incluido el presidente Gustavo Salazar, fueron informados de las prácticas abusivas de los dos entrenadores y aun así no tomaron ninguna medida para evitar o detener el maltrato.
La GEF llevó a cabo una investigación que duró varios años en los que tomó en cuenta las declaraciones de testigos de nacionalidad mexicana y suiza y de gimnastas y entrenadoras francesas. Con base en lo anterior, la GEF considera que los entrenadores Demay y Pellerin sometieron a las gimnastas a repetidos abusos.
“Eran extremadamente controladores y amenazantes no sólo con la señora García también con su entrenador, el señor José Antonio Martínez Barraza. Además, abusaron verbalmente en repetidas ocasiones, la avergonzaron delante de sus compañeras de equipo y la sometieron a ella y a sus compañeras a un entrenamiento excesivo, sin tener en cuenta las necesidades individuales de las gimnastas y las lesiones que García ya acusaba, poniéndola así en riesgo de sufrir más daños y lesiones”, indica la resolución, cuyo documento tiene Proceso.
Abusos físicos y sicológicos
En total, Elsa García denunció ocho incidentes en los que la pareja de entrenadores franceses la violentaron durante campamentos, entrenamientos y competencias en ciudades de México y del extranjero entre el 15 de abril y el 5 de octubre de 2019, uno de los más significativos fue el ocurrido en Tijuana, Baja California, durante los entrenamientos y el selectivo para los Juegos Panamericanos de Lima.
Este hecho lo denunció prácticamente en el momento en que ocurrió. García publicó un video donde se ve a Demay tirarle una pesa en los pies. Si la gimnasta no hubiera reaccionado a tiempo el disco de acero de 10 libras (4.5 kilos) le hubiera caído en el pie derecho.
Elsa García narró en su denuncia al GEF que durante esa concentración el entrenador ordenó a las gimnastas que entrenaran con pesas muy pesadas. Como ella recientemente se había sometido a una cirugía de espalda le pidió no levantar tanto peso. Al francés no le importó y le dijo que obedeciera. Entonces Demay empezó a acosar verbalmente a García y luego a intimidarla llamándola “vieja”, “senil” y “abuela”. Con 29 años en ese momento era la más veterana de la selección mexicana de gimnasia.
Nota de origen: https://www.proceso.com.mx/deportes/2024/5/16/sancion-historica-entrenadores-por-maltrato-la-gimnasta-mexicana-elsa-garcia-329033.html